Los linchamientos en el Estado de Puebla, han aumentado por el huachicol, por no tener un protocolo de atención a estos hechos violentos y por la negligencia de las autoridades, así lo consideró la antropóloga especialista en justicia a mano propia, Elisa Godínez Pérez.
Luego de que este 7 de agosto, siete personas fueran linchadas por una multitud de casi 200 personas en el municipio de Cohuecan, la especialista, dijo que los linchamientos ocurren por el hartazgo social ante la impunidad y porque las autoridades no atienden las demandas ciudadanas. Además, en todos los linchamientos, se ha registrado que semanas previas a los asesinatos, hay un aumento delictivo, pero los mandos, nunca hacen algo al respecto.
En su opinión, Puebla tiene regiones en donde ha repuntado la incidencia delictiva, principalmente el robo de hidrocarburos y las muertes de mujeres, no obstante, las autoridades han sido omisas. Incluso cree que el nuevo gobernador, Luis Miguel Barbosa Huerta, debería de implementar una alerta roja en la entidad por la violencia y robustecer los protocolos de seguridad.
Agregó que Adolfo López Badillo, anterior presidente de la Comisión de Derechos Humanos (CDH) del Estado de Puebla, también ignoró las advertencias que se dieron a nivel nacional, ya que, en mayo, la CNDH alertó que 14 municipios poblanos, eran focos rojos por linchamientos.
Godínez Pérez, sugirió fortalecer los protocolos para atender este tipo de incidentes, y que exista una mejor comunicación entre policías municipales, estatales, Guardia Nacional y Ejército, ya que, con lo ocurrido en Cohecuan, consideró que hubo una incapacidad absoluta por parte de las fuerzas policiales.
